Los cambios en tu vida, no lo provocará un nuevo año, los cambios, los debes provocar tu mismo. Cuando cambies y te hagas más comprensivo con todo el medio que te rodea, podrás ver las cosas
mejor, cuando tus propias actitudes sean diferente.
La forma más especial y la que te dará más pautas de buenos cambios en tu persona, será cuando esperes un nuevo año, perdonando.
Perdonar y pedir perdón, es dejar que actúe el Espíritu en el lugar donde existe nuestro orgullo y nuestro resentimiento.
Dios nos mira más allá de nuestros errores con mucho amor...Cuanto más vemos y sentimos su bondad, más nos enamoramos de Él.
En cuanto más nos enamoramos de Él, nuestras vidas automáticamente se van alineando con Él.
Toda sanación en nuestras vidas fluye de esta relación amorosa.
Al entrar en un profundo conocimiento de su amor, es cuando, de hecho, nos sanamos y tenemos la experiencia más sutil de la unión con Él, sabiendo que su amor puede transformar las más profundas
heridas. "
Perdonar es el camino de la sanación...es el dejar marchar la dureza que se tenía hacia una persona, soltando todas esas cosas que abrigábamos contra esa persona y soltándola de ese
vínculo...perdonar es un proceso que dura toda la vida.
LO MAS IMPORTANTE DE TODO PERMITIR QUE JESÚS ACTUÉ EN MI VIDA CON COMPLETA LIBERTAD
Y QUE SEA EL QUE GUIE LA BARCA DE MI VIDA.
Para poder perdonar tenemos que entender que la voluntad de Dios para nuestra vida es que tengamos un corazón perdonador, que echemos fuera todo resentimiento o rencor que se
quiere anidar en nuestra vida y permitir que DIOS sea quien guié por completo nuestra vida.
Deja lo demás en manos de DIOS, el se ocupara del resto. Si no quieres volver a ver a esas personas a quien perdonaste, porque te hace daño, no lo hagas, pero perdona.
Te Invito a que acercándonos mentalmente a todas las personas que nos hirieron, oremos, diciendo el nombre de cada una de ellas.
Cuando perdonas te liberas de toda carga que te ata y te entristece
Hoy es un dia de liberación, liberate de las cadenas que te atan al pasado, a la angustia, a las cosas que aun hoy lastiman tu corazón.
Deja esa carga pesada en las manos de Dios y se libre de toda tristeza, de toda amargura, de todo lo que no te deja avanzar, crecer.
No vives solo; eres un ser que se relaciona con el prójimo, ya sea la familia, los compañeros de trabajo, la sociedad. Las relaciones con los otros, siempre producen conflictos debido al egocentrismo, lucha por el poder, y el pecado.
Para relacionarte adecuadamente con los demás y poder resolver tus conflictos y sobre todo que te puedan entender es necesaria comunicar claramente tus necesidades y al mismo tiempo escuchar las necesidades de los otros.
Debes aprender a amar a las personas con las que te relacionan, sin juzgar severamente y aceptándolos con defectos y virtudes porque también tú eres imperfecto. Y para que esto suceda debes... amar a tu prójimo.
El amor verdadero que nace en Dios te hace capaz de amar a tu prójimo y te prepara para el perdón que es la llave que Dios usa para que puedas salir de la prisión de la ira y el rencor.
La tierra del perdón nace en el amor de Dios, nace en la luz del señor y esa luz la proyectarás en tu prójimo y los que te hicieron daño.
APRENDIENDO A PERDONAR
El perdón no es simplemente para liberar de culpa a quien nos ofendió, el perdón es un mecanismo para que yo sea libre de la amargura que dejó esa acción en mi corazón.
Yo puedo decidir perdonar a alguien, que no está arrepentido de verdad de haberme dañado, por que mi intención al perdonar, no es que esa persona quede libre de culpa, si no que yo quede libre en mi interior, que yo tenga paz, que yo pueda vivir bien, que haya desatado la amarra que me tenía detenido en el puerto.
Es muy importante saber, que el perdón no exime de culpa al ofensor, sino que libera al ofendido.
Tu y yo necesitamos decidir perdonar, para ser libres de las heridas del alma.
El perdón es un mecanismo para que nuestro corazón sane de las heridas, para que nuestra alma brille, para que nuestra vida vaya en aumento, para que tu y yo podamos desarrollar este potencial que poseemos y que nadie nos puede quitar nunca.
El perdón es el aspecto más importante de tu crecimiento espiritual, y es el perdón de uno mismo lo que les da a ustedes la llave para lograr la luz de sus almas.
Cuando van a ver a un sanador o a un doctor, en esencia están tomando parte en la práctica del auto-perdón. Esto es así porque la sanación activa libera energías que se habían solidificado dentro de su aura, y la sanación se lleva a cabo con base en una decisión ya sea consciente o inconsciente de perdonarse a ustedes mismos o a otra persona.
Todo es energía en el Universo, así que libérense de la duda con respecto a la motivación por lo que se refiere al perdón.
Muchos de ustedes que ya llevan algún tiempo en algún camino de crecimiento espiritual pueden ver los beneficios que se obtienen al traer más luz a su aura y no dudan con respecto a los motivos para trabajar conscientemente en su aura como energía.
Así que, ¿por qué dudan cuando trabajan en otro aspecto del Universo que también es energía? Lo que cuenta es su intención de vivir en más luz.
Hay un punto muy importante es que podemos decidir perdonar, tomamos la decisión de ya no traer al presente las cosas pasadas, incluso nos mantenemos firmes en la decisión de no criticar, ni agredir a la persona que nos ofendió. Sin embargo, no podemos decidir dejar de sentir.
Si tu quieres de verdad, que se vaya lejos lo que sientes, no depende exclusivamente de ti, pero no es imposible dejar de sentir.
No es fácil, pero es milagroso. Es muy difícil elevarse espiritualmente cuando todavía te encuentra aferrado al pasado y a sentimientos de rencor y resentimiento.
Haz una evaluación objetiva y honesta. Admite que todos cometemos errores y que por muy graves que estos sean, sólo estamos actuando de acuerdo a lo que sabemos y a nuestros recursos.
Quizás personas que no son tan avanzadas espiritualmente le hayan herido en el pasado.
Sin embargo, si has elegido el camino espiritual, te lo debes a ti mismo comprender, perdonar y olvidar.
No se trata de ser santos… se trata de sanarse a ti mismo.
Los pasos principales para perdonar a alguien son los siguientes, a saber:
a.. Identifica plenamente la herida específica que le hicieron, y la persona que se lo hizo.
b.. Decide perdonar a pesar de lo que siente en su corazón.
c.. Confiesa con su boca ese perdón aunque estés sólo, no tiene que ir a decírselo a aquella persona; lo puede hacer en la privacidad donde se encuentre en ese momento.
d.. Yo podría ir y decirle a alguien: "te perdono por esto y aquello", y aquella persona decir: "pues mira si te lo puedo volver a hacer lo repito otra vez".
e.. Recuerda que el perdón no es para liberar de culpa al otro, sino para que yo sea libre de las heridas del alma.
f.. Acercate a Dios y dígale desde el fondo de su alma:
"Señor, yo decido perdonar, quita lo que siento,
borra de mi corazón estas heridas, dame un corazón nuevo,
te entrego el mío, ven a mi vida Jesucristo a Ti te lastimaron
profundamente, a ti te dañaron y te atreviste a decir a
Tu Padre: "perdónalos por que no saben lo que hacen",
¡Señor, yo te digo hoy perdona a tal persona, por que me
lastimó profundamente, y llévate de mi corazón este amargo
sentimiento!, "yo hago mi parte, tu haz la tuya".
También nosotros hemos lastimado a mucha gente, con intención ó sin ella, hemos herido profundamente el alma de nuestros seres queridos; hay que pedirles perdón.
Las situaciones que recordamos en las que estamos conscientes que los hemos ofendido, necesitamos anotarlas, y debemos decirles: "perdóname".
El acto de perdonarse a sí mismo cambia la energía y las estructuras físicas de tus células y de tu ADN. La culpa es una emoción negativa muy poderosa, que nos empequeñece.
La culpa en sí, por decirlo de alguna manera, cierra los sistemas de energía de tu cuerpo y por lo tanto disminuye y, en casos extremos, bloquea el flujo de la Energía y el Amor Divinos hacia todo el cuerpo.
Como cada una de tus células tiene conciencia, ellas también pueden llevar la esencia y la energía de la culpabilidad dentro de ellas, y se hace más densa.
Con esta energía más densa fluyendo a través de todo nuestro cuerpo y en los núcleos mismos de las células, las enfermedades con las que han trabajado ustedes en su lucha por lograr el crecimiento espiritual y la luz, dejan un residuo.
Esto sucede aunque ustedes piensen que han sido curados.
Este residuo que permanece en el cuerpo debido a que no saben perdonarse a sí mismos y actúa como un anteproyecto para la creación de la misma enfermedad o de una similar.
Es posible, sin embargo, que este anteproyecto de energía densa pueda migrar de una parte del cuerpo a otra.
Así es como funciona. Tú sigues una disciplina espiritual y escoges trabajar conscientemente sobre una u otra área de crecimiento, o sobre una enfermedad en particular, o sobre el perdonar a otra persona.
Tú haces el trabajo con la energía y con lo que ves como el trabajo de perdonar; pero al hacerlo, te concentras más en liberar y perdonar a la otra persona, sin realmente trabajar en la verdadera cuestión, que es el perdonarte a ti mismo.
Muchos de ustedes están haciendo esto a medias, porque la parte de ustedes que en este momento está espiritualmente consciente condena a las otras partes por haber estado tan equivocadas y por haber desperdiciado tanto tiempo.
No puedo expresar la importancia tan grande que tiene el perdonarse a uno mismo, porque este perdón y esta aceptación de uno mismo son las claves para sobrevivir a los cataclismos de un mundo turbulento.
El perdonarse a uno mismo y la aceptación de uno mismo tienen una influencia positiva directa sobre todo nuestro cuerpo.
Muchos creen que el acto de perdonarse a sí mismos para mejorar su salud provoca un conflicto de causas.
Ellos creen que solamente perdonarán para mejorar su salud.
El acto de perdonar, y hablo especialmente del perdón a uno mismo, los llevará a estar más en contacto con la luz de su alma, donde no existe un conflicto de causas.
La estructura del Universo es de luz y amor, y para que esa luz y ese amor fluyan hacia los lugares donde la luz y el amor no llegan, ese flujo debe ser abierto para convertirse en un flujo mayor.
El perdón es una de las cualidades universales de clemencia que ayuda a desbloquear y así permite que la luz y el amor de Dios fluyan.
El acto de perdonarse a sí mismos, y el proceso que atraviesan en los niveles físico, emocional y mental, nos enseñarán mucho acerca del funcionamiento de la mente.
Esto los capacitará y fortalecerá para que puedan abrazar a otros con compasión y auténtico perdón.
El verdadero perdón sólo puede venir de un corazón libre de culpas, de un alma que se han perdonado realmente y que se encuentra llena de la luz de la aceptación de sí misma.
Así que, ¿qué es el perdón? ¿Cómo podemos aprender a perdonar, y cuál es el proceso detrás del perdón? Muchos de ustedes tienen miedo de iniciar el proceso del perdón porque sus motivos no son muy claros, y entonces sienten que no están realmente perdonando.
Perdonar es escoger cambiar un pensamiento, una creencia y una emoción con respecto a otras personas y situaciones.
Como todo en el Universo es energía, el perdón también es un proceso de transformación de energía.
Tanto el perdonar como el no hacerlo es una elección.
Cuando existe alguien en su vida a quien ustedes creen no poder perdonar, entonces la energía de esa persona y de esa situación permanecen dentro de su aura. Esto significa sencillamente que el perdón es como cualquier otro proceso de auto-curación.
Porque el perdón en sí mismo es un proceso de desenredar aquellas partes de los cuerpos mental y emocional que se encuentran enredadas en las energías densas que la situación con la otra persona conlleva.
Además de esto, hay líneas de energía que existen entre cada uno de ustedes y cada una de las personas con quienes hayan tenido un intercambio alguna vez, sin importar qué tan triviales hayan sido estos intercambios. En esencia, su aura tiene memoria genética, y esto es lo que dispara la intuición.
Cuando encuentran imposible perdonar a otro, permanecen energéticamente conectado a esa persona. Por lo tanto, están permitiendo que el dolor, el abuso y el trauma permanezcan con ustedes. Esto, queridos míos, es una elección.
El perdón no es algo que ustedes pueden o no pueden hacer.
Es simplemente un asunto de elegir cambiar tus pensamientos, creencias e ideas acerca de una situación en particular o de una persona en su vida.
El perdón es el aspecto más importante de Tu crecimiento espiritual, y es el perdón de uno mismo lo que les da a ustedes la llave para lograr la luz de sus almas.
Todo es energía en el Universo, así que libérense de la duda con respecto a la motivación por lo que se refiere al perdón. Muchos de ustedes que ya llevan algún tiempo en algún camino de crecimiento espiritual pueden ver los beneficios que se obtienen al traer más luz a su aura y no dudan con respecto a los motivos para trabajar conscientemente en su aura como energía.
Así que, ¿por qué dudan cuando trabajan en otro aspecto del Universo que también es energía? Lo que cuenta es su intención de vivir en más luz.
Los Guías y los Maestros Espirituales no ven todos los conceptos erróneos de la personalidad; nosotros sentimos la intención del alma.
En esencia, queridos míos, al no perdonar a otro, al no permitir que su energía los eje, están permitiendo que el dolor y el abuso continúen. Es tan sencillo como eso.
Además, el acto de perdonar también permite a la otra persona que siga avanzando, ya sea que se encuentre aún en el medio ambiente de ustedes, en otra ciudad o incluso en otra dimensión. Cuando ustedes cambian el modelo de energía que esta persona o este suceso han provocado para que ustedes lo impriman en su aura, entonces ustedes también liberan a esta persona en un nivel energético.
Mientras ustedes no sean capaces de perdonar y liberar a una persona de su culpa, o de la responsabilidad de su sufrimiento, esta persona permanece energéticamente unida a ustedes en uno o más niveles.
El perdón crea armonía en el Universo porque ustedes están dando a la otra persona una mayor libertad y felicidad.
El amor trae capacidad de perdón al prójimo y a ti mismo: Debes perdonar a tu prójimo, a tu enemigo.
Debes perdonar a los que te han hecho daño, a aquellos que te dañaron y pecaron contra ti.
Solo con el perdón te liberarás de la esclavitud de la ira hacia otros y te sentirás digno y limpio ante Dios y los hombres.
Y ante ti mismo. ¿Pero... te estarás preguntando como podrás perdonar a alguien que he ha hecho tanto daño?
Por ti mismo es imposible, pero entendiendo que también has sido pecador y que Jesucristo te perdonó, podrás hacerlo.
El perdón, sobre todo, es una decisión que realizas con tu voluntad para soltar el dolor en obediencia a la Palabra de Dios.
En el evangelio de San Mateo Jesús nos responde con respecto al perdón al prójimo:
"Señor, cuántas veces pecará mi hermano contra mí que yo haya de perdonarlo? ¿Hasta siete veces?" (Mateo 18:21).
"No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete" (Mateo 18:22).
Esto significa que el perdón debe practicarse cada vez que eres agredido, ofendido o no recibes el amor o apoyo que esperas.
Si no perdonas irás engendrando resentimiento que va en aumento, hacia el rencor y el odio haciéndote esclavo de esos sentimientos y separándote de Dios.
Estos sentimientos negativos son contrarios al nuevo mandamiento que te ha dado Dios sobre el amor al prójimo (Juan 13:34).
El perdón trae beneficio a ti mismo y a los que te rodean.
A ti mismo porque sólo de esta forma te liberas de tu opresor que es la persona a la que odias, aunque esta se encuentre a distancia, porque mientras odias tus emociones, sentimientos y metas están en función de la venganza y juicio contra tu enemigo.
Si quieres ser libre, entonces debes perdonar. Perdonar es una decisión, es avanzar en tu camino o quedarte paralizado por hechos que ya no se pueden cambiar. Es tu elección.
Como el perdón es una decisión lo haces con tu voluntad.
La empatía es importante para perdonar. Quien te ha hecho tanto daño es una persona que está dañada profundamente en su interior y es esclava de otros a través del odio y el rencor.
El acto de perdonar es una verdadera lucha espiritual pues tienes dos naturalezas, pero el perdón es dirigido por el Espíritu Santo en oración porque debes enfrentar a esos sentimientos dolorosos que has tratado de evadir ya sea de tu pasado o de tu presente.
Perdonar a los causantes de hechos dolorosos y que puedes recordar es una decisión que puedes hacerla ante Dios cuando estés en la presencia del Señor..
Pero debes también perdonar a personas que te hirieron en el pasado aun desde niño, para romper las ataduras del dolor en lo más profundo del corazón.
Para esto el Santo Espíritu te irá revelando y dirigiendo a través de terapia de oración, mensajes de la Palabra de Dios, testimonio de otras personas y diferentes circunstancias que Dios utilizará para revelarte la verdad..
Muchos de tus conflictos emocionales tienen sus cadenas en hechos del pasado no resueltos por falta de perdón.
Cuando perdonas te fortaleces espiritualmente y creces a la semejanza de Cristo.
ORACIÓN DE PERDÓN PARA LIBERAR LAS CARGAS – PROSPERIDAD UNIVERSAL
Ahora Señor, siento que no puedo amar con libertad.
No puedo abrazar, tengo temor, temo ser herido.
Por eso yo ahora delante de tu presencia de paz y seguridad perdono
a ese amor que no me supo amar y respetar porque yo no me di a respetar
Me perdono a mí mismo por haberme equivocado en el amor. Me perdono a mí mismo porque tú me has perdonado y me pides perdonar a mi prójimo.
Yo perdono ahora a mi compañero, pareja.
Lo perdono por no haber sido auténtico en el noviazgo,
por haberme engañado, traicionado,
por no darme lo que me había prometido
Por tanto dolor que ha traído a mi vida y a mis hijos.
Dejo atrás el dolor, el odio, el rencor y los sentimientos de celos
y venganza porque me hacen esclavo y prisionero,
y yo hoy quiero ser libre en tu perfecta paz.
No permitiré tampoco que me agredan, porque soy digno y limpio, soy tu hijo
No permitiré más la agresión. Perdono a mi pareja.
Lo perdono por su falta de responsabilidad para con nuestros hijos.
Perdono su abandono, sus defectos, pero no permitiré más que
peque contra mi vida.
Lo perdono porque no me ha amado como yo lo he amado.
Perdono toda su falta de amor y comunicación.
El amor es la única emoción verdadera, y se constituye en la piedra fundamental con la que se crea la Luz y toda la materia.
Aquello que te permitirá dejar atrás tus heridas es el perdón.
Cuando nos centramos en nuestros pensamientos y creencias de ahora mismo, en el momento presente, eligiéndolos con todo el cuidado con que elegiríamos un regalo para un amigo especial, entonces tenemos el poder de escoger el curso que damos a nuestra vida.
Si estamos centrados en el pasado, carecemos de la energía necesaria para el momento presente. Si vivimos en el futuro, vivimos en una fantasía.
El único momento real es ahora mismo. En este momento es donde comienza nuestro proceso de cambio.
Hemos de dejar marchar el pasado y perdonar a todo el mundo.
El perdón es lo más poderoso que puedes hacer por tu fisiología y por tu espiritualidad, a pesar de lo cual sigue siendo una de las cosas menos atractivas para nosotros, debido en buena medida a que nuestros egos nos gobiernan de un modo inequívoco.
Perdonar se asocia de algún modo con decir que está bien, que aceptamos el hecho perverso. Pero eso no es perdón.
Perdón significa llenarse de amor e irradiar ese amor hacia el exterior, negándose a transmitir el veneno o el odio engendrado por los comportamientos que causaron las heridas.
El perdón es un acto espiritual de amor por uno mismo, y envía a todo el mundo, incluido tú mismo, el mensaje de que eres un objeto de amor y que eso es lo que vas a impartir.
Ahora adéntrate en la magia de estos Pensamientos Poderosos y vibra en la sintonía del Perdón.
Este es el momento de transformar tus viejas creencias.
Ejercita estos Pensamientos Poderosos y siente desde el corazón este milagro que ya comenzó a ocurrir.
HOY DECIDO PERDONAR Y LLENARME DE AMOR
Me doy el regalo de liberarme del pasado
Olvido los agravios que me hicieron y perdono con amor.
Elijo disfrutar la vida y dejar el pasado atrás
Soy maravilloso y cada día se me hace más fácil perdonar
Acepto mis errores y me perdono para seguir adelante.
Da igual lo que me hayan hecho, decido olvidarlo ahora mismo por mi propio bien.
Tengo mi corazón lleno de amor y comprensión para con los que
me hayan ofendido.
Mi capacidad para perdonar aumenta cada día
Soy lo suficientemente fuerte como para no dejar que nadie me ofenda.
Sé que siempre encontraré la solución que más me beneficie,
si confío en mi mismo y en Dios
Hoy me lleno de amor y de perdón.
Me Perdono a mi mismo y me lleno de amor.
Soy Libre.
El Secreto para Ser Feliz es el Perdón.
Perdonar es liberarnos de ese pensamiento, de ese recuerdo, y poner límites de una vez Perdonar no es olvidar, es recordar sin dolor, sin amargura, sin la herida abierta; perdonar es recordar sin andar cargando eso, sin respirar por la herida, entonces te darás cuenta que has perdonado.
Perdona todo a quien nada se perdona a sí mismo.
Se perdona en la medida en que se ama.
EL PERDÓN ES LA LLAVE QUE CIERRA CICLOS - PROSPERIDAD UNIVERSAL
El perdón es una llave que cierra ciclos. Independientemente de cómo actúes ante cualquier cosa, ante una institución o una persona, siempre terminarás perdonándote a ti mismo, porque fueron tus pensamientos los que crearon las energías hacia esa persona, institución o cosa.
HO'OPONOPONO CON CÓDIGOS SAGRADOS - PROSPERIDAD UNIVERSAL CÓDIGOS SAGRADOS 877-8888 para el Perdón, 35133 para el Amor y 3333 para la Gratitud.
Para Sanar el cuerpo, la mente y el alma. Activa el perdón, el amor y la gratitud y sana, a través de esta ejercitación guiada con códigos sagrados y mantra, Lo siento 877, perdóname 8888, te amo 35133, gracias 3333 por 45 ( cuarenta y cinco) veces.
Realiza esta ejercitación sagrada diariamente y recibe la sanación total.
Ejercitación guiada de activación, con audio, música y sonidos subliminales.
Realiza esta ejercitación diariamente con ALEGRÍA, FE, GRATITUD, SIN ANSIEDAD, EN POSITIVO Y VIVE UNA VIDA DE ABUNDANCIA.